En este artículo explicamos el aporte que realizan las proteínas y aminoácidos a nuestro organismo, las gramos que aportan los diferentes alimentos, su influencia en el deporte y la consecuencia de un consumo excesivo.

Las proteínas son el macronutriente vital para el crecimiento, desarrollo y mantenimiento de nuestro organismo.

Participan en la gran mayoría de los procesos metabólicos del cuerpo. Constituyen casi el 50% del peso seco de los tejidos.

Aminoácidos esenciales

Las proteínas están compuestas de aminoácidos.

A éstos aminoácidos se les reconoce como esenciales, son diez:

  • Isoleucina
  • Leucina
  • Lisina
  • Metionina
  • Fenilalonina
  • Treonina
  • Triptófano
  • Valina
  • Histidina (semiesencial)
  • Alanina (semiesencial)

Para que una proteína sea completa deberá de tener presentes los diez aminoácidos.

Las proteínas de origen animal (carnes, pescados, huevos, lácteos)  son completas por sí solas. Pero las de origen vegetal (soja y derivados, legumbres, cereales integrales, frutos secos y semillas)  no.

Por ello es bueno juntar varias, para así obtener todos los aminoácidos al completo.

Puedes combinarlos en el mismo plato como por ejemplo lentejas con arroz, pero no es necesario siempre y cuando a lo largo del día te asegures de ingerirlos.

alimentos con proteínas

Cantidad de proteína por gramos de alimentos

Alimentos Gramos de proteína
150g de carne 33 gramos
150g de pescado 25 gramos
2 huevos 12 gramos
300 de ml leche 9 gramos
50g de queso 14 gramos
80g de legumbres 16 gramos
100g de pan 9 gramos
100g de pasta 12 gramos
100g de arroz 7 gramos
50g de frutos secos 10 gramos

Cómo funcionan las proteínas

Nuestro organismo deshace las proteínas descomponiéndolas para obtener así los aminoácidos esenciales y formar nuevas proteínas.

Son necesarias para cualquier proceso biológico y juegan un papel fundamental en la regeneración de tejidos, formación de enzimas, vitaminas y jugos gástricos.

Las estructuras del pelo, piel, uñas, músculos, órganos internos, nervios, huesos, dependen de las proteínas.

Forman parte de hormonas como la insulina (páncreas) o tiroxina (tiroides).

Los anticuerpos que nos protegen y luchan contra bacterias y/o virus también son proteínas.

En resistencia, el colágeno es la proteína principal para la formación de tejidos de cicatrización y refuerza las paredes arteriales.

Las proteínas son útiles hasta para hacer funciones que no son de su competencia principal. Pueden desdoblarse convirtiéndose en energía si no hay un consumo habitual o reservas disponibles de grasas e hidratos de carbono.

El hígado es capaz de convertir en grasa un exceso de proteínas, siempre que no sean requeridas para sus funciones, o en energía para usarla en un futuro necesario.

El hígado es capaz de convertir en grasa un aporte excesivo de proteínas. Clic para tuitear

Aporte apropiado de proteínas

Se debe tener en cuenta tu constitución, tu estilo de vida, y sobre todo tu actividad física diaria.

Si realizas deporte dependerá del tipo que sea.

Bien de resistencia (tenis, running, natación…) de fuerza, de velocidad, si es en fase de entrenamiento, en fase de competición o de recuperación, las cantidades oscilan entre 0,8 gramos por cada kg de peso coporal, hasta los 3 gramos  por kg diarios.

Para asegurarte que estás ingiriendo un correcto aporte proteico diario es recomendable que te pongas en manos de un nutricionista deportivo y elabore una dieta adaptada a tu deporte. Si necesitas ayuda contacta ahora con nosotros.

Es necesario adaptarlo a cada persona ya que en internet hay auténticas barbaridades en cuanto a las recomendaciones de proteínas a consumir.

Se puede confundir la relación entre las proteínas a consumir con el deseo de aumentar la masa muscular o resistencia muscular.

Con un aporte adecuado puedes obtener los objetivos deseados sin necesidad de consumirlas en exceso.

Consecuencia de un consumo excesivo de proteínas

Aunque las proteínas son necesarias para el buen funcionamiento del organismo, no es aconsejable tomar mucha más cantidad de la que necesitamos.

A esto se le añade la mala calidad de determinadas proteínas (últimamente se pone en duda la calidad de los alimentos que compramos por la cantidad de hormonas y otros añadidos que se incorporan bien para que puedan durar más en la estantería del supermercado, bien para que sean más atractivos a los ojos del consumidor, bien para aumentar su tamaño y aumentar su producción…)

Un consumo excesivo prolongado en el tiempo de proteínas provocará una sobrecarga principalmente a nivel hepático y renal.

Se ha relacionado una alimentación demasiado hiperproteica con una mayor incidencia de padecer infartos a nivel cardiaco como cerebrales, así como problemas de piel como pueden ser la psoriaisis o dermatitis.

Crea un desequilibrio ácido-base del organismo, lo que aumenta la descalcificación de los huesos.

A todo esto hay que añadirle también el empeoramiento de otras patologías que puedas padecer, como sucede con la hiperuricemia (gota), con el colesterol, triglicéridos…

No dudes en contactar con nosotros si deseas llevar una dieta hiperproteica sin poner en riesgo tu salud.

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